Cuando se combinan correctamente, neumáticos y ruedas más anchos implican más caucho en la carretera para aumentar la tracción. Siguiendo esta línea de pensamiento, existe una razón por la que los autos en la pista usan ruedas y neumáticos de carreras extra anchos: se agarran a la carretera y comienzan a moverse en lugar de derrapar. Los neumáticos más anchos obtuvieron un mejor rendimiento en la prueba de deslizamiento, generando mayor gravedad en los giros que los neumáticos más delgados. En cuanto a la distancia de frenado, los neumáticos más anchos suelen reducir la velocidad más rápido sin un efecto drástico.
Las ruedas más anchas suelen ser más pesadas. Los neumáticos más anchos montados en estas ruedas también facilitan seguir los surcos de la carretera, lo que puede arrastrarte de un lado a otro si no prestas atención. Los neumáticos más anchos no se abren paso en condiciones de humedad o nieve tanto como los más estrechos, y son más propensos a derrapar y perder agarre con lluvia intensa. Dado que un neumático más ancho tiene una mayor superficie de contacto con el suelo, presenta una mayor resistencia a la rodadura, lo que también aumenta el consumo de combustible.